10 pel\u00edculas de acci\u00f3n nuevas en Netflix y que adem\u00e1s son buenas
El éxito de Tyler Rake confirma que las películas de acción están de moda. La intensidad de sus escenas, saltos, tiroteos, golpes y la originalidad para salir de los conflictos más enrevesados pone a prueba nuestra adrenalina. Por eso, hoy seleccionamos las películas de acción que Netflix ha estrenado en lo que llevamos de año.
Está a punto de convertirse en el mejor estreno del año en Netflix con casi 90 millones de espectadores. Tyler Rake (Chris Hemsworth), un mercenario que ofrece sus servicios en el mercado negro, y al que contratan para una peligrosa misión: rescatar al hijo secuestrado de un capo de la mafia india que se encuentra en prisión.
En el turbio submundo de los traficantes de armas y los narcos, una misión que se preveía letal pasa a convertirse en un desafío prácticamente imposible. Pero si has visto la película y el final no lo entiendes del todo, no te preocupes, es justo lo que el director Sam Hargrave quería conseguir.
Escrita y producida por Joe Russo (Vengadores: EndGame), algo que se nota en las espectaculares escenas de acción, el guionista ya trabaja en la secuela.
Si a Mark Wahlberg le das una pistola tienes un éxito asegurado. El exagente de policía Spenser (Mark Wahlberg) regresa a los bajos fondos de Boston cuando destapa la conspiración causante de un asesinato muy mediático. A pesar de las constantes amenazas, Spenser decide tomarse la justicia por su mano para demostrar que nadie está por encima de la ley.
La película retrata la vida del diplomático de las Naciones Unidas Sergio Vieira de Mello, interpretado por Wagner Moura, el inolvidable Pablo Escobar de la exitosa serie Narcos, también de Netflix. En ella Ana de Armas es la amada de este defensor de los derechos humanos y la paz en el Irak sumido el caos tras la invasión estadounidense.
Premio del público en el Festival de Sundace, es un vistazo a la vida de aquellos que asistieron al campamento de verano para adolescentes discapacitados que tuvo lugar muy cerca de Woodstock, a finales de la década de los 60 y principios de los años 70.
Kareem Manning es una niña de 12 años que contrata a un criminal para asustar al nuevo novio de su madre, el oficial de policía James Coffee. Cuando las circunstancias se tuercen, ambos tendrán que colaborar para detener al mafioso más peligroso de la ciudad de Detroit.
Jahkor (Ashton Sanders) es un joven que desde niño ha visto como su padre, JD (Jeffrey Wright), llenaba su vida de malos hábitos y delitos, mientras su madre hacía todo lo posible para que que su hijo no siguiera el mismo camino.
Pese a los intentos de su madre, Jahkor sigue los pasos de su padre y termina en la cárcel junto a él. Mientras está encerrado en prisión, y con un hijo en camino, Jahkor comienza un viaje en el que rememora todas las circunstancias que le trajeron hasta aquí e inicia una unión con el hombre al que nunca se quiso parecer.
Cuando la hija de Mari Gilbert desaparece, la inacción policial lleva a que sea ella quien comience una investigación particular en la isla de Long Island en la que Shannan fue vista por última vez. Su búsqueda saca a la luz más de una docena de trabajadoras sexuales que han sido asesinadas.
Habitual productor y guionista de series como Parks and Recreation, Master of None o Little America, Alan Yang debuta ahora tras las cámaras con esta Tigertail que llega de la mano de Netflix, y que supone la primera piedra de toque para Yang, hasta ahora sólo fogueado en terreno televisivo, y ante su gran primera oportunidad.
Nos cuenta la historia de un trabajador de una fábrica taiwanesa, quien abandonará su tierra natal para buscar una nueva oportunidad en Estados Unidos, donde luchará por encontrar una conexión mientras equilibra tanto nuevas responsabilidades como responsabilidades familiares.
No tiene unas secuencias de acción comparables que las otras películas, pero la tensión es la misma y tiene alguno momentos de disputa que la convierten en una cinta altamente recomendable si quieras pasar un buen rato entretenido. Es una de las películas más vistas de Netflix en todo el mundo y otro ejemplo de que el contenido español está de moda fuera de nuestras fronteras.
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