Un rayo de felicidad; ‘Mi corazón insiste’

QUÉ HA PASADO

• Débora sufre un aborto.

• Andrés es detenido por el asesinato de Marcelo.

• Lola está embarazada.

• Tiberio comprueba que tiene una hija con Soledad.

Se celebra el juicio por el asesinato de Marcelo y Etelvina declara a favor de Andrés. En cambio, el inspector Correa y un guardia de seguridad de las empresas Santacruz, al que ha sobornado Tiberio, lo hacen en su contra. “Esa noche estaba trabajando y vi cómo él golpeó a Marcelo”, miente este último. Horas después, el juez lee el veredicto y Andrés es condenado a cadena perpetua.

Daniel vende sus acciones de la empresa y decide irse lejos de Los Ángeles sin iniciar un tratamiento para su adicción a las drogas. Sofía es incapaz de hacerle recapacitar. Finalmente, Tiberio logra conocer a Rodrigo y de vuelta a la casa donde tiene retenida a Soledad, amenaza a esta con matar al policía: “Sé que estás enamorada de él y si sigue molestándome lo cubriré de plomo”.

Ajeno a esto, Suárez tiene una pelea con Correa y decide presentar su renuncia. Lola visita a Andrés en prisión para contarle que está embarazada, pero él la rechaza y se niega a escucharla: “Tú eres la responsable de que esté aquí. Vete y no vuelvas, quiero olvidar que algún día te ame”.

Por su parte, Adela esta retenida en un prostíbulo y bajo la influencia total de las drogas. Mientras Correa enfurece al saber que no ocupará el puesto de Rodrigo y se reúne con Tiberio para ponerse a sus órdenes, Débora asume la presidencia de Exportex. La primera medida que toma es revisar todas las instalaciones y así descubre unos contenedores con sustancias peligrosas. Poco después, cita a su abogado y le entrega unos documentos como seguro de vida. “Si me pasa algo, deben llegar a manos de las autoridades”, indica.

Cuando recibe unas fotografías de Soledad en actitud muy sensual, Lola se queda de piedra y se las lleva a Rodrigo. “En el pasado fue raptada y obligada a prostituirse. Por desgracia, la persona que dirige esa red es tu padre”, le explica él.

Se repite el juicio por el asesinato de Marcelo

Ahora que sabe la verdad, Lola decide viajar a Panamá en busca de alguna pista sobre el paradero de su madre. Etelvina la acompaña. Meses después y en un avanzado estado de gestación, visita varios bares preguntando por Soledad.

Así, da con Damaris. “Fuimos compañeras, le encantaba este negocio”, comenta. Y añade: “Tiberio está muerto. Tu mamá lo roció con ácido”. Para comprobar que es verdad, Volcán visita el cementerio y justo enese momento comienza a tener contracciones.

Con el falso nombre de Carlos, Tiberio la ve y se ofrece a llevarla al hospital. Tras un largo parto, Lola da a luz una niña a la que llama Isabel en honor a su tía Chabela. Soledad es llevada a un prostíbulo y Adela, a pesar de estar drogada, la reconoce. Rodrigo localiza a Miguel, el guardia que mintió en su declaración contra Andrés, y consigue reabrir el caso.

Cuando se celebra el juicio de apelación, el joven es declarado inocente. Lo primero que hace es ir a la casa de Lola, que acaba de regresar a Los Ángeles, a conocer a su hija. Como ella no le permite entrar, Suárez se cuela con la ayuda de Pepe y se emociona al tener en brazos a la pequeña Isabel.

Adela logra escapar del prostíbulo y deambula por las calles. Sin embargo, cuando se dispone a comunicarse con su familia, Bobby la descubre y se la lleva nuevamente. Tiberio coloca una bomba a la salida de la casa de Rodrigo y este queda gravemente herido. De urgencia, es operado y aunque los médicos logran salvar su vida, pierde la vista.

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