Amigas celosas: los celos en una amistad no son siempre malos y te contamos por qué
Reconócelo, a veces estás celosa cuando tu mejor amiga aparece con un nuevo novio o alguien que conoció en el gimnasio. Y aunque ella dudamos que lo reconozca también le pasa de vez en cuando contigo. Los sentimientos como los celos o la competitividad no están muy bien vistos cuando hablamos de amistad, pero para la psicología también tienen su utilidad. Sin llegar a los extremos a los que se llegan en las amistades tóxicas y falsos amigos o cuando nos relacionamos con un amigo narcisista, una nueva investigación ha descubierto que esos celos que a veces te asaltan cuando contemplas la cara que se le queda a tu mejor amiga al ver a su nuevo novio son sanos y que, incluso, pueden hacer que vuestra relación sea aún mejor. ¿No nos crees?
Los celos entre amigos tienen su utilidad
Es hora de quitarnos la careta: todos somos humanos y si las fotos que tu mejor amiga ha subido Instagram en un resort de ensueño abrazando a sus nuevos amigos de la oficina te ha provocado una punzada de envidia, pues toca asumirlo con más o menos gracia. De hecho, una nueva investigación publicada en el Journal of Personality and Social Psychology afirma que sentir unos celos bien mesurados puede ser hasta positivos para vuestra amistad.
Según este estudio, cuando las amistades se ven amenazadas por otra persona, como una nueva pareja o un nuevo amigo, todos sentimos celos, al fin y al cabo para nuestro cerebro se está barajando la posibilidad de que el “intruso” nos acabe sustituyendo en el corazón de nuestra amiga y esa es una amenaza que nos llena de inseguridad.
¿Y qué tiene esto de positivo? Pues aparte de hacernos descubrir nuestra capacidad para esbozar una sonrisa falsa cada vez que el tercero en discordia entra en nuestro radio de acción, este grupo de investigadores ha comprobado que esos celos motivan a mucha gente para ser aún mejores amigos.
Ante la amenaza de perder a un amigo y ser sustituidos por otra persona mucha gente revisa cómo puede mejorar su relación con esa persona de confianza e invertir más tiempo y esfuerzo en una relación de amistad que, a lo mejor, estaba descuidando. Solo así se consigue ser amigos para siempre.
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