Ahorra calefacción y cuida el medio ambiente
Con la llegada del frío, solemos encender la calefacción, un simple gesto que provoca un aumento en nuestra factura y en la emisión de CO2. Apunta nuestros consejos para disfrutar de un ambiente más cálido en tu hogar, sin que tu bolsillo se resienta y cuidando el medio ambiente. ¿Te apuntas?
Evita las emisiones de CO2 en el hogar
La Agencia Europea de Medio Ambiente advierte de los problemas de salud que se derivan de la contaminación atmosférica. Enfermedades cardiovasculares, pulmonares, infartos, un largo etcétera que genera más de 430.000 muertes prematuras al año en nuestro continente. Los coches siguen siendo la principal fuente de contaminación, pero las calefacciones también tienen un peso importante en los malos datos. Las emisiones de CO2 que se generan en una vivienda de 100 m2 en la que viven cuatro personas se aproximan a las dos toneladas anuales. ¿Cómo podemos conseguir ahorrar calefacción sin morirnos de frío mientras cuidamos el planeta? Este año, además, pasamos muchísimo más tiempo en casa.
Con 21 grados es suficiente
Según un estudio realizado por el Ministerio, únicamente bajando dos grados la calefacción (con 21 grados es suficiente ) ya reduciríamos en un 10 por ciento las emisiones contaminantes asociadas a su uso.
Consigue un buen aislamiento de tu casa
Un buen sistema de aislamiento en las paredes, puertas y ventanas de las viviendas, podría hacer que este porcentaje aumentara. El 90 por ciento de los edificios en España no están aislados térmicamente y esto supone que la vivienda consuma el doble de energía de la que necesita. Existen ayudas públicas que permiten cubrir las fachadas con aislantes con diferentes espesores. Estas medidas podrían ahorrar al mes un 60 por ciento en la factura de la calefacción.
Extrae el aire de los radiadores
Purgarlos es necesario al menos una vez al año, cada vez que comienza el invierno. Así tendrán la potencia necesaria. Tampoco calientes las habitaciones vacías. Para no derrochar en consumo, cierra la llave de los radiadores de las habitaciones que no utilices.
Ventila la vivienda sólo el tiempo justo.
Si es posible, aprovecha el momento más soleado del día para abrir las ventanas; 15 minutos son suficientes.
Con ropa abrigada
Si estás teletrabajando es importante disponer de una buena ropa de casa que permita abrigarte bien y no tirar de calefacción.
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