La dura infancia de Grace Kelly, que hoy cumpliría 90 años
La de Grace Kelly, como la de muchos personajes que después brillan y se hacen un hueco en el papel cuché, no fue una infancia sencilla. Para nada. Al menos, así lo reflejan todas las biografías y perfiles que hemos recibido de ella, que hoy, de estar viva, celebraría su 90 cumpleaños.
Pero, ¿qué o quién hizo de esos comienzos de su vida una especie de calvario, y a la vez un camino en el que curtirse? Una de las responsables fue su hermana Lizanne, la menor de ellos y quien le quitó el trono de ser la mimada de la casa y quien recibiera todas las atenciones.
No solo eso, sino que, como reconoció en más de una ocasión, le hizo la vida absolutamente imposible: «Solía golpearla, sí, ¡realmente lo hice! Yo era la hermana malcriada que le hacía la vida imposible, especialmente si estaba con sus novios». Una confesión que acompañó, también con la de los rudos métodos disciplinarios de su madre.
Margaret Kelly, que tuvo que cargar con el peso de la educación de sus hijos mientras su marido, John B. Kelly, se ocupaba de sus negocios e intentaba convertir a la familia en una de las más adineradas de Filadelfia. Y lo hizo recurriendo al castigo y en algún que otro golpe.
«Hoy ella sería arrestada por abuso infantil, porque no supo medir la vara. Ella exigía obediencia», eran las palabras de Lizanne, que describía a la perfección con ese puñado de palabras, la rectitud que se inculcó en esa casa y que pudo ser la primera piedra para la exitosa carrera en la que brilló en Hollywood.
Una decena de películas y un Oscar (en 1954 por ‘La angustia de vivir’) serían, si tuviéramos que resumir su carrera con dos rasgos, la mejor manera de explicar qué fue antes de que se cruzara en su camino Rainiero de Mónaco y ella decidiera dejar la vida que había levantado con sacrificio, para dedicarse a la vida de palacio y convertirse en un icono de estilo que aún perdura hoy.
Tenía solo 26 años cuando se casó con él. Por el camino, había dejado romances con alguno de sus compañeros de reparto, como Clark Gable o Ray Milland, o con uno de sus profesores de Arte Dramático. Un matrimonio que duró 26 años: justo a que su vida se vio truncada por un fatídico y hasta la fecha misterioso accidente de tráfico que la convirtió, aún más si cabe, en un mito de elegancia.
Fuente: Leer Artículo Completo