El look 'beauty' del desfile de Dolce & Gabbana en Milan
El pasado 27 de febrero, y tras tomar el testigo a Nueva York y Londres, finalizó la cita más relevante de la moda italiana, Milan Fashion Week. Una edición que reunió a algunas de las maison más relevantes de la industria como Max Mara, Gucci, Prada o Bottega Veneta, que subieron a la pasarela sus colecciones para la temporada otoño/invierno 23-24, atractivas propuestas de moda que vinieron acompañadas de las tendencias que marcarán la pauta de los maquillajes de estos próximos meses.
Y aunque hay quienes arriesgaron en cuestiones beauty, como Miucca Prada y sus llamativas pestañas de colores, la corriente minimalista que apuesta por maquillajes de sutiles con simples correcciones para potenciar las características naturales de la piel vuelve a coronarse, una temporada más. Y precisamente el desfile de Dolce & Gabbana, Sensuale, ha sido una de las mejores demostraciones, una mujer con un maquillaje clásico, sofisticado, elegante y luminoso a la par que natural, donde tan solo destacan, y de forma muy sutil, sus facciones. Una propuesta acorde con una colección que ahonda la feminidad, el erotismo y el poder. «La belleza no basta para ser sensual, pero el carisma es esencial», apuntan desde la propia casa de modas.
El look beauty de Dolce & Gabbana
El look beauty de las modelos que han pisado la pasarela con las nuevas propuestas otoño/invierno de la firma italiana cuenta con dos colores predominantes, el negro y el rojo, los mismos que marcan el ritmo de la colección. El objetivo de este maquillaje, según apuntan desde Dolce & Gabbana, es amplificar la sensualidad. Aquí va el paso a paso para que puedas copiarlo en casa:
Piel natural y luminosa
Como primer paso, la piel se preparó con el icónico Secret Veil Primer, para posteriormente aplicar Velvet Skin Natural Matte Foundation y lograr esa cobertura de larga duración que asegure un acabado mate pero con efecto aterciopelado y luminoso, rechazando cualquier sequedad. El toque de color llegó con el Blush of Roses, adaptando el tono a la tez de las modelos.
Una mirada «felina»
Los ojos fueron uno de los grandes atractivos, en este caso con una de las tendencias más habituales, el delineado cat-eye, que en este caso más allá de realizarse con eyeliner en color negro, se potenciaba gracias al uso de una sombra de ojos en stick que aportaba mayor profundidad e intensidad en la mirada.
El poder del rojo
El tono rojo intenso de los labios, brillante y luminoso, realzaban más si cabe la sensualidad de cada modelo y lograban un resultado más poderoso y llamativo. Conseguían, así de forma inmediata, situarse como el punto destacado del maquillaje.
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