Pronovias da una segunda vida a los vestidos de novia

En un marco en el que la moda vintage se impone con fuerza y celebridades como Tiffany Haddish aseguran que tras gastarse un dineral en un vestido de Stella McCartney, piensa ponérselo hasta la saciedad en diversos eventos, era solo cuestión de tiempo que la moda nupcial atendiera a la situación actual de la moda, especialmente en un momento en el que el coronavirus ha hecho que los planes de boda de muchísimas parejas hayan quedado en ‘stand by’. Pronovias Group colabora con Brides do Good, entidad sin ánimo de lucro con sede en Londres, para empoderar a las jóvenes vulnerables de todo el mundo al lograr dar a los vestidos de novia una segunda vida. Para lograrlo, la marca nupcial anima a las novias a que donen sus vestidos de novia en su establecimiento Pronovias más cercano, que le entregará los vestidos a Brides do Good para que sean revendidos. La campaña #MyDressxHerFuture promueve un movimiento social en el que las mujeres tienen la oportunidad de hacer del futuro un lugar más esperanzador.

Los ingresos de cada vestido de novia vendido a través de dicha entidad se destinarán a programas sociales internacionales que luchan por el empoderamiento de mujeres y niñas vulnerables y por garantizar que reciben la ayuda y educación necesarias para labrarse un futuro. Pero todavía hay más: por cada vestido donado, Pronovias aportará un diseño procedente de su propia colección, por lo que el impacto de esta colaboración será doble.

“Fortalecer los programas de responsabilidad social corporativa del Grupo Pronovias es una prioridad para todos nosotros. En Brides do Good hemos encontrado el socio perfecto con el que forjar una relación a largo plazo con impacto positivo sobre las mujeres, y esperamos crear una nueva mentalidad que se aleje del concepto de moda desechable en una industria que ha tardado en sumarse a las nuevas tendencias de sostenibilidad», explica Amandine Ohayon, CEO de Pronovias.

Lo dice porque Brides do Good trabaja con organizaciones sin ánimo de lucro con las que comparten los mismos valores solidarios: sostenibilidad, necesidad, imparcialidad y valor. «Nos sentimos muy orgullosos de nuestra asociación con el Grupo Pronovias y de unirnos a la campaña #MyDressxHerFuture. Juntos, creamos un movimiento positivo con una propuesta sencilla: los vestidos de novia como instrumento solidario. Creemos que todo niño tiene el derecho fundamental a recibir una educación y a disfrutar de una infancia segura y feliz. Enfocando la industria nupcial desde una perspectiva diferente y animando a las novias a que marquen la diferencia con sus vestidos, podemos transformar la industrial y ofrecer a todas las mujeres un futuro mejor», asegura Chantal Khoueiry, fundadora de Brides do Good.

Son miles de mujeres las que ya se han comprometido a donar su vestido de novia. Y tú, ¿le dirías el “sí quiero” a esta iniciativa?

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