El traje de estar en casa será el uniforme favorito de las chicas más clásicas esta primavera
Antes de la década de los 50, que una mujer llevase un traje de chaqueta y pantalón era un motivo de conflicto. A ellas se las acusaba de revolucionarias y de querer, incluso, suplantar la identidad masculina. Lo cierto es que hay algo reivindicativo en este clásico de la sastrería por el que apostaron diseñadores como Yves Saint Laurent –con Le Smoking– y actrices como Katharine Hepburn o Greta Garbo. Los movimientos feministas contribuyeron también, con sus proclamas de equidad de género, a que el traje para mujeres goce de una aceptación plena en 2020. Trajes icónicos hay muchos. Desde el esmoquin que llevó Angelina Jolie en los premios Bafta de 2014 (firmado por Saint Laurent), hasta los pantalones, la camisa y la corbata de Diane Keaton en Annie Hall (Woody Allen, 1977), pasando por el impecable dos piezas blanco de Max Mara que Susan Sarandon eligió para la gala de los Sag Awards en 2016 o la chaqueta y el pantalón de increíble terciopelo rojo de Gwyneth Paltrow en 1996 y que ya es el atuendo que mejor representa el espíritu minimalista de los años 90. La lista es infinita.
“Cada vez que oigo a un hombre decir que prefiere una mujer en falda le digo; pruébate una”, se dice que comentó Katharine Hepburn a Calvin Klein. La actriz norteamericana utilizó la moda como elemento reivindicativo y puso patas arriba los códigos que dictaban la vestimenta femenina de los años 40. Gracias a ella y a diseñadoras como Coco Chanel, que buscaron la estética al servicio de la comodidad, hoy podemos llevar zapatillas deportivas con un vestido o acudir a la oficina con unas bailarinas.
© Cortesía de Mango
Americana estampada, de Mango. COMPRAR
Hace ya algunas temporadas que el traje sustituyó a los clásicos vestidos de invitada en las bodas y que los conjuntos coordinados dejaron atrás su fama de aburridos para erigirse como una de las tendencias más importantes de esta primavera. En este sentido, Mango apuesta por un dos piezas con estampado de flores (ay, ¡las flores!), que escala puestos en el podium de los looks más elegantes del buen tiempo. Cómodo, versátil –no hay nada más sencillo que un traje cuando no sabemos qué ponernos– y optimista, no existe mejor opción para afrontar las jornadas laborales de teletrabajo y para estrenar los días de luz eternos cuando todo esto amaine.
© Cortesía de Mango
Pantalón cargo, de Mango. COMPRAR
Para las chicas más clásicas, la firma catalana recupera la que fuera durante muchos años una de las mezclas cromáticas malditas y que la moda ha luchado por desterrar. El azul marino y el negro no es, probablemente, la combinación más silenciosa y sofisticada, sino también la favorita de algunos miebros de la realeza como la Reina Letizia o la ex Royal Meghan Markle. Una vez más, la vuelta a los clásicos se erige como favorita de las que prefieren mantener el protocolo y la disciplina estilística, incluso en días en los que pasarse las horas a cubierto no es solamente la mejor, sino la única opción posible, pero también de las que necesitan ropa reconfortante, que acoja como el mejor de los hogares. Paradójicamente, el traje sastre es capaz de ofrecer todo esto.
SUSCRÍBETE AQUÍ a nuestra newsletter para recibir todas las novedades de Glamour
Nuestros periodistas recomiendan de manera independiente productos y servicios que puedes comprar o adquirir en Internet. Cada vez que compras a través de algunos enlaces añadidos en nuestros textos, Condenet Iberica S.L. puede recibir una comisión. Lee aquí nuestra política de afiliación.
Fuente: Leer Artículo Completo