Los tratamientos que más le convienen a tu piel según tu edad

A menudo nos fiamos de las recomendaciones de amigas, primas, tías, madres y demás mujeres de nuestro entorno en lo que a belleza se refiere. Y es que si a ellas les ha funcionado un producto o tratamiento, por qué no me iba a funcionar a mí. Pero cada piel es un mundo y no solo eso, sino que la piel va cambiando de estación a estación y de año en año. Es decir, igual que las necesidades de la piel no son las mismas en invierno que en verano, tampoco lo son a los 20 que a los 30 ni a los 50.

La piel es distinta en cada etapa de la vida y hay que responder de la forma más específica posible a sus necesidades y estado de ese momento. Y es que si no lo hacemos, dará igual lo buenos que sean los productos o tratamientos que empleemos para cuidarla, estos no serán tan efectivos como deberían: «En la medicina estética no todos los tratamientos valen para todas por igual, la edad de la paciente es fundamental, no debemos saltarnos este dato a la ligera, es un factor determinante a la hora de elegir tratamientos y esperar ciertos resultados», cuenta la doctora Carmen Martín. «Debemos entender que no todas las técnicas y productos tienen el mismo resultado en cada etapa de la vida. Muchos tratamientos son realizados a diferentes edades y no es un error, pero lo que sí debemos es darles ciertas características dependiendo de la edad y no convertirlos en tratamientos estándar», añade el doctor Licitra, director de Med Estetic y académico de la Ilustre Academia de Ciencias de la Salud Ramón y Cajal.

Tratamientos entre los 20 y 30 años

En esta edad la clave no está tanto en paliar ciertos problemas como en anticiparse a ellos. Especialmente es cuando se debe empezar a tratar la piel para prevenir los signos de la edad que una vez aparezcan serán difíciles de solucionar. Los tratamientos que se elegirán en este momento serán suaves y nada invasivos. Tal y como señalan ambos doctores, si no existe ningún desencadenante com la genética o una enfermedad, en esta edad no deben realizarse tratamientos «porque sí». Recomiendan realizar tratamientos dirigidos a prevenir el envejecimiento de la piel, tratar problemas como el acné, la celulitis o potenciar la luminosidad.

Tratamientos recomendados: Hidrataciones, limpiezas y peelings faciales superficiales de principios activos, IPL para eliminar el acné y sus cicatrices. En cuanto a los corporales, exfoliaciones, masajes reductores o radiofrecuencia multipolar.

Tratamientos entre los 30 y 40 años

El principal objetivo es evitar el envejecimiento prematuro. Y es que, aunque empiecen a aparecer las primeras imperfecciones en la piel porque esta empieza a perder grosor, todavía hay tiempo de anteponerse a los problemas más graves.

Tratamientos recomendados: radiofrecuencia facial, rellenos sutiles a base de Ácido Hialurónico, pequeñas inyecciones de Bótox en bajas dosis y plasma rico en plaquetas (PRP), señalan los expertos. En cuanto al cuerpo, recomiendan combinar la caboxiterapia, bioestimulación, ultracavitación o radiofrecuencia con mesoterapia para potenciar la disolución de la grasa, desintoxicar y reafirmar.

Tratamientos entre los 40 y los 50

Por la disminución de estrógenos, la piel se reseca y pierde vitalidad al frenarse la estimulación de la síntesis de colágeno y elastina, como indican el Dr. Licitra y la Dra. Martín. A estas edades hay que prestar especial atención al contorno de ojos, que es la primera zona que se ve afectada por e paso del tiempo, el cansancio y la falta de sueño, haciendo que nuestro aspecto se vea más envejecido con ojeras, bolsas y patas de gallo.

Tratamientos recomendados: Además de los dichos en la etapa anterior, se deben añadir los enfocados a nutrir intensamente y a atenuar las arrugas más marcadas. Por ejemplo, el ácido hialurónico, los hilos tensores, la bioplastia o el lifting no quirúrgico con ultrasonidos. A nivel corporal se recomiendan las envolturas reductoras y reafirmantes, que también mejoran la circulación y activan el sistema linfático.

Tratamientos más allá de los 50

Ahora es el momento de luchar contra las arrugas, de tratar de disimularlas y suavizarlas, evitando que se vuelvan más profundas, especialmente las que surgen por la expresión. También se combatirá la flacidez, como apuntan los médicos, actuará modificando el óvalo facial.

Tratamientos recomendados: ácido hialurónico, biolifting facial con inductores de colágeno y plasmafrecuencia. Para mantener la silueta los masajes reductores combinados con drenajes linfáticos.

Eso sí, lo que ambos doctores dejan claro es que «no podemos luchar contra el paso del tiempo o detenerlo, pero para que el envejecimiento no sea nuestro envejecimiento debemos afrontarlo de la mejor manera posible, por ello existe la medicina estética preventiva», de la Dra. Carmen Martín. «Oponernos al paso de los años es un error, lo que podemos es actuar frente a los efectos característicos de la edad, siempre atendiendo a las necesidades y exigencias que nuestra piel presenta, sin caer en la frivolidad y los rostros artificiales» concluye el Dr. Licitra.

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