Rizos cuidadísimos, baby hairs y flequillos años setenta: estas son todas las tendencias que hemos visto en Eurovisión 2021 (que tú también llevarás)
Adiós, Madrid. Hola, Países Bajos. Tres palabras: cabello, cabello y cabello. ¿Qué tendra que ver una cosa con la otra? ¡Mucho! Porque he despertado del letargo pándemico y chandalero que nos tenía (¿tiene?) poseídas en la redacción y me he trasladado (como cientos de personas, tras 300 PCR, #besafe) hasta la ciudad más cool de las últimas semanas, donde este 2021 se celebra Eurovisión: Róterdam. Casi nada.
¿El próposito? Descubrir de la mano de Moroccanoil, el Presenting Partner del concurso este año -y el encargado de dar vida al cabello de algunos artistas-, las tendencias que van a arrasar, las que ya estamos viendo por la calle y por supuesto, las que se han subido al escenario durante estos últimos días. Un planazo que solo se vive una vez (sé que lo has leído cantando) en la vida y que ha estado aderezado por el mal tiempo, la ilusión de poco a poco volver a la normalidad y el glamour que caracteriza a Eurovisión año tras año y que en esta ocasión se multiplica al habernos saltado una edición debido a la pandemia.
El encargado de desvelar todos los estresijos capilares entre bambalinas, no ha sido otro que Antonio Corral Calero, Global Creative Director de Moroccanoil y Hair Creative Director de Eurovisión. Un torbellino de magia capilar y energía (es lo que tiene encontrarse con un compi patrio entre tantas nacionalidades) que me ha desvelado no solo cómo nos peinaremos en los próximos meses, sino también las tendencias y secuelas capilares que nos ha dejado la pandemia. Algunas son obvias y las vemos reflejadas en el escenario, pero otras te sorprenderán, querida lectora. Después de leer lo que Antonio tiene que decir solo querrás correr a la peluquería y convertirte en la dueña y señora del DIY para conocer a fondo tu cabello.
«Las tendencias de Eurovisión se adaptan un montón a lo que vemos por la calle. Hemos visto looks muy muy reales, aunque también hay que tener en cuenta que van con la vestimenta. Creo que los flequillos, independientemente de la largura del cabello vuelven a estar presentes hasta en el verano, fíjate. Cuando sabemos que normalmente molestan más, hay más humedad, se rizan… pero aún y así queremos que nos encuadren la cara ‘they frame your face’. Los vemos como protagonistas. Hemos visto flequillos que son muy rectos con melenas de una pieza en Roxen de Rumanía, luego hemos visto los ‘courtain bangs’ muy al estilo años setenta como llevan los italianos, el flequillo abierto que se puede moldear y es muy de celebrity… todo lo que de alguna manera es un corte antiguo y que se puede llevar un poco crecido. Ya no vemos tantos cortes sharp, como las melenas super rectas, el short bob al milímetro… «, cuenta Antonio.
Y este cambio tiene que ver mucho con la pandemia: queremos menos manteniemiento y estilismos mucho más effortless, «No es una tendencia clara, pero sí que se ve una calidad en el corte, colores vibrantes. Los rubios, por ejemplo. Sabemos que en verano todo el mundo se va un poco más a las balayage pero no vamos a ver los contrastes de raíces tan oscuras y puntas tan rubias. Hay como un efecto ‘sun kissed’ y un punto más natural. El flequillo parece que te ha crecido, pero es que te lo has cortado así. Es un estilo muy ‘worned out’ que busca la vesatilidad», añade.
Cuando le pregunto por su tendencia favorita su respuesta es clara, y me hace reflexionar mucho sobre cómo tratamos la melena en el día a día, «El pelo bien cuidado. Yo creo que no hay nada más sexy que cuando uno se cuida el cabello. Para mí es súper importante lo que hemos visto durante la pandemia: la gente se ha cuidado el pelo, sorprendentemente. Ha habido un movimiento en la industria que, de nuestra parte, desde Moroccanoil hemos incentivado, porque hemos creado nuestra web de educación online. Hemos visto que ahora la gente no solo quiere cuidarse, sino también entender lo que hace y por qué».
Y puede que esta sea una de las razones por las que se lleva la naturalidad sobre el escenario, no tanto en la elección estilística (no olvidemos que se avecinan unos años veinte inminentes tras la pandemia) pero sí en el momento beauty, «La colaboración que hacemos con Eurovision es única. Es decir, el slogan de Moroccanoil es ‘Be an original’. La gente ya no está estirando su cabello rizado. Trabajas ese cabello, lo hidratas bien. ‘Be an original, be yourself’, sé auténtico… La gente está expresando realmente cómo se siente. Y yo creo que liberarte del secador o de la plancha de alguna manera, y de cara al verano, más lo que hemos pasado, da una sensación de fuerza tremenda. Creo que esas melenas al viento son un punto de guerra, de rebeldía. Dices, ‘that´s who I am’. Es muy difícil ponerlo en palabras, pero cuando los ves actuar lo entiendes todo».
Por ejemplo, en el equipo de Blas Cantó hay una andaluza divina que le he hecho la melena a lo Jennifer Lopez y luego le he trabajado los ‘baby hairs’, que los estamos trabajando mogollón en Eurovisión y antes los intentabas ocultar. Ahora les sacamos partido: es el contouring del cabello. Me encanta el hecho de que podamos, con el cabello, enmarcar el rostro; podemos hacer que la cara parezca más alargada, más triangular. Me encanta verlos pero sobre todo, que se muestren así. Destiny, la representante de Malta, hasta los decora con mini piedras. Es un statement», afirma Antonio.
Pero no es el único mensaje que hemos visto este año: el ‘genderless’ también se ha subido al escenario y ha arrasado de forma magistral, «Además de la tendencia años 70, también encontramos el ‘wet look’. El tipo de pelo a lo David Bowie. La cantante Kateryna Pavlenko del grupo Go_A que representa a Ucrania lo muestra perfectamente. El ‘genderless’, el ‘no gender’ ahora tiene una plataforma en Eurovisión, en Moroccanoil y esto es espectacular. Y luego Tusse, el representante de Suecia también es un claro ejemplo con las trenzas, fiel a su esencia, su estilismo… en un principio no sabía si era chico o era chica, ahí está. Te hace pensar. Y es que da igual. El ‘genderless’ se ha convertido en un mensaje con muchísima intención y que ocurra en una plataforma tan grande es maravilloso», explica.
A su vez, Manhiza, la representante de Rusia hace del pelo su mensaje: un lazo de motivos inspirados en la traidición de su país, que sirve como punto de atención, pero también de protesta y llamada de atención hacia el papel que la mujer tiene el su país. Un himno feminista que vemos en su looks simplista y su cabello trabajadísimo con baby hairs, acabado wet e incluso accesorios.
Y es que, estamos ante unas tendencias capilares muy emocionales. Ya no solo hablamos de cabello, sino de lo que hay detrás, de cómo nos sentimos y qué queremos mostrarle al mundo. Una consecuencia clara del momento en el que vivimos, donde la mirada y el pelo se han convertido en la carta de presentación. Ahora nos mantenemos fieles a nosotros mismos, y esto dista mucho de lo que hacíamos en 2019, año en el que se celebró la última edición de Eurovisión, muy diferente a la de 2021, y en la que Antonio también participó.
«Yo creo que hay una evolución encaminada a encontrar tu esencia. La gente adornaba un poco más en 2019, había como accesorios en el cabello. Ahora vemos que la ropa es mucho más colorida, pero el cabello suele ser más natural, más ‘urban ready’. Hay un punto mucho más ‘underground’, hay artistas mucho más jóvenes que se enfocan más en la ropa y no tanto en un pelo extravagante. Montaigne, la artista que representaba este año a Australia, se ha rapado. El otro día hablando con ella le pregunté, ‘¿Cómo te sientes al no tener pelo?’ Porque le he estado preguntando a todo el mundo sobre el cabello y siempre me han contestado que da fuerza, personalidad… depende de cómo te sientas es un flirteo corporal que te ayuda a ser quién eres. ¿Pero si no tienes pelo, qué haces? Entonces ella me dijo que el ‘nakedness’, cuando te sientes como desnudo es cuando eres tu yo real. Y ahí es donde ella ha encontrado su fuerza. Y me parece que eso es tan único…».
https://www.instagram.com/p/CPE6zdZDn_v/
Una publicación compartida de montaigne (@actualmontaigne)
La cuarentena no solo ha instalado el teletrabajo, el pijama como uniforme y el auge del skincare, sino también la forma en la que entendemos la individualidad del cabello, «Cuando pasan, no solamente catástrofes, sino cuando hay momentos en los que en la sociedad hay dificultades, el arte surge mucho más fuerte. Ahora es cuando nos reinventamos: nos estamos inspirando en la gente real. No solamente estamos aceptando más la naturalidad del cabello, sino que también estamos aprendiendo a cuidarlo. Durante este tiempo de pandemia la gente ha practicado y esa práctica ha hecho que se sientan mejor con lo que tienen. Los salones han estado cerrados y la gente ha aprendido a aceptar, a probar, a trabajar su pelo, lo que nos ha llevado a liberarnos, ¿no? A aceptarnos», cuenta Antonio.
Aunque para sacarle el máximo partido a nuestro cabello al natural, lo más importante son los productos. Una buena rutina nos salvará de tener que hacer control de daños y sobre todo, nos facilitrá el peinado posterior. Invertir en un paso a paso adecuado para cada una es la clave del éxito, por eso, no podía despedirme de Antonio sin preguntarle cuáles son para él los tres productos de Moroccanoil que no deberían faltar en ningún tocador para conseguir pelazo.
«El Moroccanoil Treatment Original es esencial. Mantiene, ayuda a fortalecer el cabello, regenerar y sobre todo, a darle docilidad, convertirlo en algo fácil de manejar. Además sirve para todo tipo de cabellos: liso, rizado, ondulado… Después está el Dry Shampoo, que el de Moroccanoil tiene dos versiones. Uno para rubias y otro para brunette, que engrosan el cabello. Y la gente lo está utilizando además de como champú en seco, como ‘styling tool’. Y lo curioso es que lo usan con el cabello limpio para darle como un ‘powder feeling’, que elimina la electricidad estática del cabello limpio. Y por último, la Smoothing Lotion, una crema hidratante para rizos pero que también se utiliza con el cabello mojado porque se queda hidratado y muy muy suave», explica.
Tras esto: Adiós, Róterdam. Hola, Madrid con tips para cuidar el cabello incontables, muchas ganas de hablar incansablemente del flequillo años setenta (y por su puesto, de lo maravilloso que es Antonio) e ilusionada porque al fin y al cabo -y a pesar de las condiciones- Eurovisión sigue siendo una ventana al cambio y a la aceptación, que no hace más que mostrar que las tendencias que vemos en la pantalla al ritmo de ’12 points -en el mejor de los casos- go to’ son solo un reflejo de la vida real.
¡Vuelta al chándal y a la oficina!
Fuente: Leer Artículo Completo