Scarlett Johansson se suma a la nueva tendencia en ojos: llevar las sombras a juego con el vestido

Ayer, el mundo del cine se reunía para celebrar otra de sus fiestas con alfombra roja y photocall. Esta vez, le tocaba el turno a la entrega de los Bafta, que reunió a los nombres más representativos del panorama hollywoodiense y, en general, del mundo de la interpretación y la gran, y en algunos casos de la pequeña, pantalla. A la cita no faltaron rostros como el de Emilia Clarke, Charlize Theron o Scarlett Johansson, quien no ha dejado de dar de qué hablar sobre la alfombra roja, desde por su vestido hasta su maquillaje.

La actriz sorprendía con un vestido ajustado y de pronunciado escote, de lentejuelas, pedrería y plumas en el bajo, con abertura bajo el pecho y en la pierna y en color rosa. Este estaba firmado por Atelier Versace y se completaba con joyas de Nikos Koulis.

Pero si algo ha llamado la atención de su look, eso también ha sido su maquillaje. Este se construía dándole importancia a la mirada, a la que se daba volumen con máscara de pestañas y luz marcando el punto del lacrimal con iluminador o con una sombra de ojos en tonos claros. Pero el protagonismo era para la sombra de ojos rosa, del mismo tono que el vestido y que se potenciaba con el colorete y el gloss en la misma línea de color.

De hecho, a la sombra de ojos de Scarlett no le falta detalle e incluye hasta purpurina a juego con los pequeños paillettes del vestido. Y es que es justo así como lo marca la tendencia, respetando el tono concreto del vestido elegido, que debe ser a todo color. Es decir, no vale la monocromía del blanco y/o el negro.

La intensidad de la sombra de ojos, por tanto, variará en función del estilo de vestido, como mostraba Chrissy Teigen en los Grammy hace unos días con su apuesta vaporosa, lo que invitaba a que la sombra de ojos fuera también ligera y difuminada.

De hecho, hasta se llega a imitar el patrón de estampados del vestido, como hace la maquilladora Jo Baker, una experta en esta tendencia incluso antes de que estuviera de rabiosa actualidad.

Se trata de una tendencia que tiene su principal escenario en las alfombras rojas, ya que es donde más atrevidas son las apuestas y donde la paleta de color de estas es más amplia, pero solo será cuestión de tiempo que empecemos a verla a pie de calle, aunque sea para las noches de fiesta.

Y es que, aunque pueda verse como una tendencia atrevida, es realmente fácil de conseguir, ya que la sombra en cuestión se aplica cubriendo el párpado móvil al completo y difuminando la sombra, como si de una nube de color se tratase. Eso sí, el secreto está en dar con el tono de sombra justo que vaya con el vestido.




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