Todos los beneficios de Solawave, la 'varita mágica' facial

Cada vez hay menos dudas sobre que el futuro de la belleza está ligado a la tecnología. Cada poco tiempo nuevos tratamientos posibilitados por potentes máquinas llegan a los centros de estética y otros tipo de dispositivos se han ganado un lugar irremplazable en la rutina de belleza de las que más saben por sus grandes beneficios.

Entre estos lanzamientos, destinados a usarse en casa, el último en unirse a la fiesta ha sido la varita de luz roja SolaWave. Tras el éxito de otras herramientas mucho menos sofisticadas en esta red social, como el rodillo de jade o la piedra gua-sha. La potente tecnología de esta varita mágica lleva sus resultados a otro nivel y los hace perceptibles mucho antes.

Esta herramienta ha sido calificada como «el 4 en 1» para el cuidado de la piel y es que su tamaño no te hará imaginar la potente tecnología que se encuentra detrás de ella. Está dotada con microcorriente, luz roja, masaje facial con efecto lifting y calor terapéutico. Todo ello se une para potenciar el resplandor natural de la piel, reducir el enrojecimiento y los signos de la edad como líneas de expresión y arrugas. Además, desinflama y mejora la apariencia general del rostro. ¿Y qué debes hacer para disfrutar de todo ello? Esta herramienta tan solo exige entre tres y cinco minutos de uso diario. Unos momentos más de rutina facial y… ¡beneficios infinitos!, suena bien, ¿no?

Para usar este dispositivo de la forma correcta, se debe hacer de la siguiente manera: lava tu cara y sécala a toques con una toalla, con cuidado para que no se enrojezca ni se irrite. A continuación se debe aplicar el suero conductor para aumentar los efectos de la sesión. Se debe colocar muy bien, asegurándonos de que cubrimos todo el rostro. SolaWave está equipada con un sistema de encendido inteligente, por lo que no hace falta que presiones ningún botón para comenzar tu sesión, bastará con ponerla sobre el rostro para comenzar el masaje.

Los movimientos que debes hacer con ella son similares a los que se practican con la piedra gua-sha o el rodillo de jade. Posiciona el aparato en el centro del rostro y desplázalo hacia el exterior. Debes deslizar la herramienta por la frente, debajo de los ojos, mejillas, mandíbula y el cuello (¡que no se te olvide esta parte!), de esta forma sellaremos el suero que hemos puesto anteriormente.

Como ves, no es nada complicado y los beneficios parecen compensar con creces el esfuerzo. ¿Entrará esta varita en tu rutina de belleza?




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