David Cantero (‘Informativos telecinco’): as\u00ed es su lucha frente al Coronavirus

¿Cómo te ha afectado en tu tarea la situación provocada por el coronavirus? Tanto en tu vida laboral, horarios, como en tu vida personal.

Absolutamente, en todo. En principio y siguiendo los protocolos de seguridad iba a ir alternando la presentación del informativo con Isabel Jiménez una semana cada uno, pero al final nos ha tocado estar a los dos cada día, de momento. Es una labor importante la nuestra, es imprescindible ofrecer la mejor información estos días, en Mediaset y en todas las cadenas, en todos los medios. Es duro pero hay que hacerlo. En lo personal lo que más cambia es que los chicos están sin salir de casa, son adolescentes y les cuesta, claro, pero se están portando como verdaderos campeones, son un ejemplo de paciencia y responsabilidad. Mi mujer y yo somos muy caseros, nos encanta estar en casa, lo llevamos muy bien.

Especial Coronavirus: Helena Resano (La Sexta Noticias)

Especial Coronavirus: Isabel Jiménez (Informativos Telecinco)

¿Con qué talante te asomas a las informaciones sobre el coronavirus?

De máxima responsabilidad y prudencia. Es complicado y duro contar lo que sucede cuando es tan trascendente e insólito, tan dramático e inquietante, tan preocupante para tanta gente, por eso trabajas extremadamente preocupado por ofrecer sólo certezas. Es imprescindible en estos tiempos de bulos y falsas noticias. Contamos lo que sucede cotejando cada información al máximo, acudiendo a los expertos, con sencillez, de forma comprensible, con la máxima veracidad y compromiso, intentando no alarmar, aunque es difícil.

¿Es lo más duro de toda tu carrera periodística?

No lo sé, he contado tantas noticias durísimas, terribles, pero sí es lo más insólito, lo más impensable, lo más “gordo” a nivel mundial que hemos visto y contado jamás.

Por tu profesión, estás obligado a trabajar in situ. ¿Qué medidas tomáis en redacción para evitar el contagio?

Todas, distancias, desinfección, prudencia máxima, muchos compañeros trabajan desde casa o están en la calle y no entran en las instalaciones; los que vamos y venimos hacemos eso exactamente, de casa al coche, del coche a la redacción y al revés.

¿Cómo desconectas al llegar a casa?

Haciendo vida “normal”, lo más parecida posible a la de siempre, a la de A.C., antes del coronavirus, siguiendo más que nunca las benditas rutinas (mi novela “El viaje de Tanaka” demuestra hasta que punto las adoro y son importantes para mí) e intentando estar tranquilo, seguir haciendo ejercicio en la medida de lo posible, comer sano y con medida, entretenernos viendo películas o series, leyendo, tocando la guitarra; esa es mi principal vía de escape, la música! Haciendo vida en familia, eso es lo principal para mí…

¿Qué destacarías de la reacción de la sociedad española? Y de los políticos? Y al contrario, en qué te han decepcionado?

La gente, mayoritariamente, está reaccionando con solidaridad, civismo y sensatez, aunque siempre hay miserables que dan vergüenza y asco en estas situaciones. No es momento de hablar de política, eso no toca ahora, ahora solo cabe estar unidos y remar todos en el mismo sentido haciendo caso a lo que nos dicte, a lo que se nos pide encarecidamente y respetando cada norma por dura e insoportable que sea. Sólo me decepciona la gente irresponsable e insolidaria, los cretinos que no entienden la gravedad de la situación y la minimizan o la usan para polemizar o crear aún más incertidumbres, los que difunden “fakes” deberían ser severamente sancionados. Sólo el civismo, la sensatez, la sanidad y la ciencia nos sacarán de esta.

¿Qué papel juegan los periodistas en estos momentos de incertidumbre? Cuál debe ser su misión?

Creo que un papel fundamental. Ofrecer realidad y certezas, información veraz, puntual e impecable, es una de las “vacunas” contra el virus. La buena información, sin sesgos, sin polémicas, sin inexactitudes, sin alarmismo, sin desvaríos, sólo contar con precisión lo que sucede para que cada persona tenga un norte al que aferrarse; la ignorancia, la desinformación y la arrogancia periodística, son pecados intolerables estos días, un verdadero peligro!!! Apoyemos a nuestros sanitarios, a las fuerzas de seguridad y a toda la gente que lucha sin descanso por salvarnos, seamos sensatos y civilizados, todo lo demás puede esperar; saldremos de esta y volveremos a nuestras vidas, esperemos que habiendo aprendido unas cuantas lecciones imprescindibles.

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