Ghosting: qué es y cómo evitar que te dejen en verano

Se acerca el final del verano y con él muchas de las relaciones que se iniciaron con la llegada de las vacaciones, el tiempo libre y la necesidad de pasarlo bien. Y en consecuencia con el ya conocido como ‘ghosting’, un fenómeno que no es nuevo pero que en esta época del año es más habitual de lo que nos gustaría.

Y es que se trata, al fin y al cabo, de la manera más rápida, fácil y eficaz de romper con alguien, es decir, sin dar explicaciones, de forma unilateral y desapareciendo de nuestra vida para siempre. Obviamente no todas las parejas lo gestionan de la misma manera, ya que hay algunas que se lo toman con humor (las menos, la verdad) mientras que otras se llenan de odio, rencor y culpabilidad sin poder hacer nada por evitarlo.

Como suele ser habitual, Hollywood nos da dado muchos casos de ‘ghosting’, y uno de los más famosos es el de Charlize Theron, de la que se dijo que había roto su relación con Sean Penn dejándole de responder a sus mensajes y llamadas. Ella lo desmintió años después pero en nuestra cabeza siempre quedará la imagen del actor preguntándose qué había hecho mal y por qué. También Russell Brand solicitó el divorcio a Katy Perry a través de WhatsApp. O el cantante Joe Jonas plantó a Taylor Swift con un mensaje.

¿Por qué ocurre más en verano? Según apunta María Mavji, sexóloga y directora de operaciones en TherapyChat, existen varios factores que entran en juego. «Por lo general, solemos estar más relajados, lo que puede llevar a volvernos más hedonistas en la búsqueda de pareja, estando más predispuestos a dejarnos llevar. También entra en juego la autoestima y el hecho de que las altas temperaturas puedan afectar a nuestras emociones con la producción de oxitocina, endorfinas y serotonina, hormonas que suponen un papel importante a la hora de aumentar nuestro deseo sexual».

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Por ello, la mejor manera de evitar que suframos por culpa de un ‘ghosting’ es poniendo remedio antes de que ocurra. Para eso es importante que nos centremos en volver a nuestra rutina ya que, cuando una relación no evoluciona tras ese amor de verano, debemos de pensar que quizás esa persona efectivamente era un simple amor de verano.

Del mismo modo es necesario que lo compartamos con personas de confianza. «Contarlo te ayudará, entre otras cosas, a poner palabras a tus pensamientos, a escucharlos desde un lugar distinto y a validar tus emociones», explica María Mavji, que insiste en no generalizar. «Si has tenido una mala experiencia en una o varias ocasiones no significa que siempre vaya a ser así. En la mayoría de veces los amores de verano son experiencias que no tienen nada que ver con los amores de otra época del año».

Así que ya sabes, no esperes al verano que viene para evitar que alguien nos diga adiós sin que nos demos cuenta.



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