10 pantalones de Zara y Uterqüe que hacen que el lunes merezca la pena
Entre los años 20 y 30, la lista de mujeres que se atrevían a llevar pantalones se reducía prácticamente a dos nombres: Coco Chanel, pionera en introducirlos en el armario femenino y Katharine Hepburn, que no solo los llevaba a diario sino, además, en la gran pantalla. Ya de pequeñita, la protagonista de La fiera de mi niña, se divertía vistiéndose de chico y haciéndose llamar Jimmy. "Nunca he vivido como una mujer. Más bien como un hombre. He hecho lo que me ha dado la gana y he conseguido dinero suficiente para mantenerme. No me da miedo quedarme sola". En respuesta a estas declaraciones, la periodista que la entrevistaba le preguntó: ¿por eso llevas pantalones? A lo que la Hepburn repuso: no, llevo pantalones porque son cómodos.
El mismo aplomo que se deprende de sus palabras se podía leer en los gestos, siempre firmes, discretos y oportunos, que acompañaban su desgarbada silueta. La actriz no ocultaba su afición por el modelo ancho de pantalones palazzo que le otorgaba una mayor agilidad y libertad de movimientos, con las costuras o pinzas que aportaban estructura al talle y una pernera holgada y fluida que prolongaba (más si cabe) sus estilizadas piernas. Podríamos sintetizar la imagen de la elegancia en todos y cada uno de los fotograma de Historias de Filadelfia y aún tendríamos que esperar a Marlene Dietrich para encontrar a otra mujer que lleve más y mejor los pantalones de vestir.
Sobre todo, porque era ella misma quien los elegía para sus secuencias como lo hacía para su vida diaria. Como dijo en una ocasión Edith Head: Uno no diseña para Miss Hepburn, lo hace con ella. Porque a la actriz le gustaba implicarse en cada parte del proceso de creación de vestuario conocedora de sus gustos, de su cuerpo, de la moda y de su poder simbólico en escena.
Y de aquellos pantalones de vestir que ella seleccionaba cuidadosamente, a los que las mujeres que dominan las tendencias escogerían para garantizar la felicidad (y la sofisticación) un lunes cualquiera. Porque ambos modelos tienen en común:
– La misma caída fluida y ligera tan elegante como desenfadada.
– El corte impecable que se ajusta al cuerpo en los lugares exactos.
– Y la estructura de pinzas que marcan cintura y potencian las líneas verticales del pantalón que más alarga las piernas incluso con mocasines planos.
Este pantalón de vestir, fluido y con pinzas bajo la cinturilla ya está en Zara y en Uterqüe:
La propuesta de Zara →
Pantalones sastre en gris perla con acabado brillante
© Cortesía de Zara
La propuesta de Uterqüe →
Pantalones altos con pernera extralarga y tejido fluido y ligero
© Cortesía de Uterqüe
Y hemos seleccionados hasta 10 pantalones Hepburn tan tendencia como los pantalones Victoria pero más cómodos, más elegantes y los únicos capaces de que el lunes merezca la pena.
Fuente: Leer Artículo Completo