10 vestidos de Zara y Mango que quedan mejor con un ramo de flores en la mano

Diana de Gales puso de moda prácticamente todo lo que llevó y tocó. Su alianza – realizada con catorce diamantes solitarios con zafiros y oro blanco – se copió y agotó a los pocos meses, igual que la gran mayoría de los trajes, camisas y vestidos que llevó durante su noviazgo y matrimonio con el Príncipe Carlos. Su vestido de novia pasó a la historia y su corte de pelo fue el más pedido en las peluquerías británicas. Todas querían ser princesas y copiar el estilo de Lady Di fue la vía predilecta de las mujeres inglesas para lograrlo. Esos son solo anécdotas del boom mediático que supuso la aparición en escena de Diana Spencer, quien, más que poner la Casa Real Británica patas arriba como casi siempre han rezado los titulares, la recompuso tornándola interesante, humana y moderna. 

El estilo de la princesa ha sido analizadísimo por centenares de expertos en el mundo y de él siguen saliendo y recuperándose tendencias cada temporada. El bolso Lady Dior de la firma francesa, la camisa de cuello bobo y mangas abullonadas, el vestido de terciopelo negro o los pantalones de ciclista conforman la lista de prendas que Diana convirtió en mitos. Sin embargo, hay un complemento que acompaña la práctica totalidad de sus looks en el que nadie ha parecido jamás reparar: el ramo de flores. 

Su mejor complemento siempre fue un ramo.© Fotografías de Getty Images; Creatividad de Mar Lorenzo Sales

Algunas dirán y no sin razón que ese complemento no era querido, sino que se añadía al look cuando Lady Di llegaba a cualquiera de sus múltiples actos oficiales y le regalaban uno. Están en lo cierto: no era ella quien antes de salir de casa combinaba sus estilismos acorde a un determinado tipo de flor. Pero una cosa no quita la otra: ese ramo de flores – siempre pequeño, siempre delicado, siempre precioso – elevaba todos sus estilismos, por lo que el peso estético que ejercían en el conjunto es innegable.

Esta norma no escrita – y nunca mejor dicho – es la que seguirán las chicas que se acercan a la moda con una visión romántica y delicada, es decir, aquellas que se pasan los días de verano enfundadas en vestidos vaporosos y bohemios y que prefieren las alpargatas planas a las sandalias de tacón fino. Aquellas que piensan más de lo que hablan y sienten más de lo que besan.

© Fotografías de Getty Images; Creatividad de Mar Lorenzo Sales

Zara y Mango serán las canteras principales para hallar esos vestidos que no necesitan otro complemento que un ramo de flores (y quizás un capazo bonito donde llevarlo) para alcanzar la perfección. En concreto, hemos seleccionado diez modelos, hechos para salvarnos de cualquier encrucijada estilística que este verano raro nos ponga por delante igual que las flores ayudaron a Lady Di a aguantar estoicamente todos esos eventos aburridos y demasiados serios para su sonrisa e igual que lo han hecho como nosotras, funcionando, en palabras de la editora de moda Vanessa Santos, como un asidero a la seguridad y un revulsivo contra la tristeza.

© Cortesía de Mango

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Con unas flores frescas en la mano (¿paniculata? ¿margaritas? ¿no me olvides?) todas estaremos guapísimas y todas llevaremos de maravilla estos diez vestidos de Zara y Mango.

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