Ana de Armas tiene las zapas Golden Goose altas que tus pitillos están deseando que te compres

No la vemos todo lo que nos gustaría, pero cuando los astros se alinean con Ana De Armas, saltan chispas. La última vez que 'coincidimos' con ella fue a principio de año, la noche de los Globos de Oro, gala a la que acudía por primera vez tras estar nominada en la categoría de Mejor Actriz por su papel protagonista en la película Puñales por la espalda. Espectacular con un vestido largo palabra de honor, confeccionado en lentejuelas color azul noche y firmado por Ralph&Russo, la actriz se coló por méritos propios en el podio de las mejor vestidas, peinadas y maquilladas, pues su coleta baja y sus labios rojos estaban también a la altura.

Mes y medio después de aquel encuentro en el que se lució aun sin recoger el premio, hemos vuelto a verla en un contexto completamente diferente, y con un estilismo que aunque a años luz de aquel de gala, era perfecto para: a) ser una de las mejor vestidas del Soho neoyorkino y b) pasar desapercibida como una mujer esilosa más.

Ana de Armas, de paseo por Nueva York.© Gtresonline

De paseo, con una amiga y por el centro de Nueva York. Sin alfombras rojas, ni focos. Prácticamente sin maquillar pero vestida para la ocasión. Los pantalones vaqueros pitillos tienen tantas fans como detractoras, pero lo que nadie puede negar es su poder de adaptación al medio: cualquier día es apto para llevarlos si el plan es urbano e informal y más si en el zapatero descansan las zapatillas deportivas de las niñas bien, las aparentemente desgatadas aun siendo nuevas y las que tienen una estrella cosida en el lateral externo: las Golden Goose.

© Cortesía Golden Goose

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