Los 10 pantalones cortos de Oysho, H&M y Zara que NO aprietan y son más elegantes que unos shorts

Camille Charriere le confesó a Alexa Chung en uno de los vídeos que la diseñadora publica con igual frecuencia que éxito en su canal de Youtube que los mejores vaqueros no suelen ser los más cómodos. En la mayoría de los casos, con independencia de que sienten bien o mal, no permiten moverse con libertad y no hablemos de sentarse en cualquier sofá, silla o (dios nos libre) el mismísimo suelo. Poco después, Reese Witherspoon lanzó esta pregunta en su cuenta de Instagram: "esas personas que dicen estar por casa en vaqueros, en serio, ¿qué tratan de demostrar?". Quizá solo quieran confirmar consigo mismos que todavía pueden enfundarse su par favorito o que de la misma manera que pasarse media vida dentro de ajustados modelos implica soñar con comodísimos pantalones de chándal, vivir más de tres meses en pijama (en sus múltiples variantes) conlleva desear unos pitillos, unos mom jeans, unos tapered. Aunque solo sea para ir de la cocina al salón y vuelta a empezar.

Los labiales rojos aportarán luz a los rostros más apagados, pero unos buenos vaqueros infunden ganas de "contonearse", tal y como hacía Carrie Bradshaw, a quien los lleva. ¿Y quién quiere pasear cuando puede contonearse, insistimos, aunque sea para ir del salón a la cocina?

© Ilustración: Mar Lorenzo/ Fotografías: GettyImages y cortesía de Zara.

Máscaras fuera. Los vaqueros cortos o largos están hechos para contonearse, no para sentarse, levantarse y agacharse. En definitiva, moverse. Los vaqueros nacieron para que la raza humana se sintiera muy sensual sin apenas esfuerzo, para que los cowboys presumieran de todavía más rudeza y las francesas de traseros pluscuamperfectos que dicen no haber pisado jamás un gimnasio (según Camille Charriere sí que van, pero nunca hablan de ello). Una cosa es la teoría o la foto y otra, la práctica o la vida. Y en la vida real, cuando junio llama a la puerta con toda su inestabilidad, belleza y primeras olas de calor se requieren pantalones cortos en los que sentirse bien en cualquier ocasión y posición; en los que sentarse en las mencionadas terrazas para disfrutar y relajarse, no para pensar en cómo cruzar las piernas para que la sangre siga circulando o cómo levantarse y colocar los shorts antes de que todos vean que ya no son unos shorts, sino más bien unas braguitas denim.

La de cosas que estamos dispuestos a hacer por una foto y la de tendencias que estamos dispuestos a llevar por exactamente lo mismo. Al final, lo importante es apreciar cada elemento en su entorno, porque no hay shorts o pantalones cortos incómodos sino ocasiones en las que no se deberían haber llevado.

Así que sigue contoneándote con tus shorts vaqueros y disfruta de la vida (en terrazas, el sofá de casa o el prado más soleado) con estos pantalones cortos de Zara, Oysho y H&M que todo lo que tienen de cómodos lo tienen de elegantes y tendencia.

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